Sobre algún puente del delta del Neva,
la noche blanca cautiva y revela
cada suspiro de Elena.
Canta una troika con voz de abedules
y el as de espadas se bate entre nubes
para sus ojos azules.
San Petersburgo
juega al absurdo
con falsa claridad.
Y a quien no duerme
se le disuelve
la frágil realidad.
Sobre algún puente Elena soñaba,
y en el oscuro temblor de las aguas
una cigüeña volaba.
¿Qué hacen las aves
cuando no saben
la dirección del sur?
Buscando estío
surcan el frío
en alas del albur.
Sobre algún puente bordado de historias,
abandonada, lloraba la novia
su blanca noche sin gloria.