El domingo me fui a la sanzala,
me puse las alas, me sentí mejor,
porque oyendo un cantar de pioneros
me sentí más lleno de Patria y de amor.
Fue como regresar a un lugar
donde guardo raíces y luceros.
Fue como si mi niña cantara
y, más, me abrazara en aquella canción.
Fui papá de un pionero de guerra
aquí en esta tierra cantándole al sol.