Siempre perdidos, buscamos; y al fin
voy por caminos que están por abrir:
Cada mañana, comienzo a vivir.
Ponte a mi lado, no llores por mí;
Yo piso fuerte, y en parte es por ti:
cada mañana comienzo a vivir.
Y tú que estás en casa, metido en la nevera,
escondes la cabeza: la muerte ronda fuera.
ya estás, ya estás...
Y tú que te preocupas por culpa del futuro,
cuando ya no te quede, será cuando te enteres.
que ya estás, ya estás…
más que enterrado en vida.
Tú en tu casa; nosotros en la hoguera.
Siempre me faltan horas de dormir.
como me gusta no tener reloj:
de madrugada me siento mejor.
Ya soy muy listo: me sé equivocar.
Cuando hablo de algo, lo he probado ya;
todo el día hablando… no pienso parar.
Tú en tu casa; nosotros en la hoguera.