Tengan cuidado
Tengan cuidado que ya llegué,
me gustan todas, todas, ¿y qué?
Soy de Santiago, puro, de ley,
nunca he llorado por un querer.
Cuando una mujer me gusta,
nada me asusta, atrás de ella voy.
La miro así, muy bonito,
y al ratito sabe quién soy.
A aquellas que se resisten
les doy el tiempo para pensar,
y luego se ponen tristes,
si no regreso ya nunca más.
Tengan cuidado que ya llegué,
me gustan todas, todas, ¿y qué?
Soy de Santiago, puro, de ley,
nunca he llorado por un querer.
La gente por donde vivo
siempre me dice que tengo swing.
Yo no sé lo que será eso,
me importa poco, yo sé vivir.
Las muchachas de mi pueblo
se alocan tanto cuando me ven.
Algunas me llaman cielo,
otras me dicen: llegó mi rey.
Tengan cuidado que ya llegó,
le gustan todas, todas, ¿y qué?
Es de Santiago, puro, de ley,
nunca ha llorado por un querer.
Tengan cuidado que ya llegué,
me gustan todas, todas, ¿y qué?
Soy de Santiago, puro, de ley,
nunca he llorado por un querer.
Tengan cuidado que ya llegué,
me gustan todas, todas, ¿y qué?
Soy de Santiago, puro, de ley,
nunca he llorado por un querer.
Tengan cuidado que ya llegué,
me gustan todas, todas, ¿y qué?
Soy de Santiago, puro, de ley,
nunca he llorado por un querer.