Bermejo está de duelo, enmudeció el suburbio
Las calles del Abasto Calladitas están
Del mundo de los vivos se fue Pichón, el Rubio
A dónde van los muertos, Señor, a dónde van?
¡Gurruminita! Lindo, travieso, callejero
Con ojos picarones, inquieto y saltarín
Por qué dejaste solo el barrio bullanguero
Y a tu hermanito amado sumido en el sufrir?
En brazos del destino Que siempre con el pobre
Se ensaña duramente Para pagarle mal
Te remontaste al cielo por revolear un cobre
En la barriada humilde vestida de percal
La muerte, ingrata y mala, te castigó temprano
Tal vez porque jugabas vino a tratarte así
Un auto que cruzaba tu barrio suburbano
Entristeció la noche postrera que te vi
Pobre mamita buena! Que te adoraba tanto
Sus horas de amarguras se pasa sin cesar
Y toma tu retrato con celo sacrosanto
Y lo acaricia a besos poniéndose a llorar
Cuántas abuelas tiernas Que tienen nietecitos
Y que en sus pechos guardan un dulce corazón
También te extrañan mucho, Como tus amiguitos
Que cariñosamente Te llamaban Pichón