Son hijos de nadie, náufragos del mundo
Jamás conocieron, cariño ni amor
Sin cuna, sin techo, como vagabundos
Errantes caminan, consigo el dolor
¿Qué vida vivieron? ¡De desheredados!
¿Qué besos paternos sus frentes besó?
Ni nombre ellos tienen, viven olvidados
De padre egoísta y mujer que pecó
Cuántos hay de ellos, que viven muy tristes
Meditando siempre, quién los engendró
Sin tener la dicha de poder saberlo
Y decirle: ¡Padre! ¿Por qué me olvidó?
¿Por qué no me ha dado un nombre, siquiera
Si yo he sido el fruto de su propio amor?
¡No sea cobarde! Conozca a su hijo
Que sufre en la vida, vergüenza y horror
Son hijos de nadie, que purgan las culpas
De hombres de plata, que fingen amar
Cayendo en sus garras, muchachas ilusas
Que siempre han soñado con un bienestar
Promesas mentidas, que llevan al crimen
De hacer abandono a un hijo real
¡Oh, seres infames! No dejen sin nombre
No entreguen al hijo a vil orfandad
Cuántos hay de ellos, que viven muy tristes
Meditando siempre, quién los engendró
Sin tener la dicha de poder saberlo
Y decirle: ¡Padre! ¿Por qué me olvidó?
¿Por qué no me ha dado un nombre, siquiera
Si yo he sido el fruto de su propio amor?
¡No sea cobarde! Conozca a su hijo
Que sufre en la vida, vergüenza y horror