Yo la geisha mimada fui de un magnífico emperador
A quién tuve prisionero en las redes de mi amor
En las noches de suave azul abrazada me estremecí
Acunándome en sus brazos mi galán cantaba así
Japonesita ven que quiero yo libar
Los dulces ósculos de miel que tu boquita sabe dar
Por conservar tu amor mi reino olvidaré
Y enardecido de pasión tu esclavo yo seré
Pero un día en el mozo vi al hijo del emperador
Y era el príncipe heredero un muchacho encantador
Al instante lo cautivé y tal fuego sintió por mi
Que acunándome en sus brazos el también cantaba así
Japonesita ven que quiero yo libar
Los dulces ósculos de miel que tu boquita sabe dar
Por conquistar tu amor mi patria olvidaré
Y enardecido de pasión tu esclavo yo seré
Una noche me descuidé y mi amante el emperador
Descubrió mis amoríos con su hijo encantador
Pero luego se acercó a mi y besándome muy triste
Se alejó cantando así
Japonesita pues
Mataste mi ilusión
Ya me rompiste mi rival que mudo está mi corazón
Solo te pido yo que al olvidarme a mi
A mi hijo llegues a querer como te quise a ti