No puedo verte triste porque me matas
tu carita de pena mi dulce amor.
Me duele tanto el llanto que tú derramas
que se llena de angustia mi corazón.
Yo sufro lo indecible si tú entristeces
no quiero que la duda te haga llorar,
hemos jurado amarnos hasta la muerte
y si los muertos aman,
después de muertos amarnos más.
Si yo muero primero es tu promesa
sobre de mi cadáver dejar caer
todo el llanto que brote de tu tristeza
y que todos se enteren de tu querer.
Si tú mueres primero yo te prometo
escribiré la historia de nuestro amor.
Con toda el alma llena de sentimiento
la escribiré con sangre,
con tinta sangre del corazón.
Si tú mueres primero yo te prometo
escribiré la historia de nuestro amor.
Con toda el alma llena de sentimiento
la escribiré con sangre,
con tinta sangre del corazón.
(J. C. M. P.)