Después de tanto soportar la pena de sentir tu olvido
después que todo te lo dio mi pobre corazón herido
has vuelto a verme para que yo sepa de tu desventura
por la amargura de un amor igual al que me diste tú.
Ya no podré ni perdonar ni darte lo que tú me diste
has de saber que de un cariño muerto no existe rencor
y si pretendes remover las ruinas que tú mismo hiciste
sólo cenizas hallarás de todo lo que fue mi amor.
Ya no podré ni perdonar...