Francamente me hubiera gustado mucho más que hubiese sido primavera y que la primera hubiera sido aquella muñeca rubia delgada y pecosa que cada tarde subía conmigo al tranvía cuando el día se dormía. Francamente me hubiera gustado mucho más a tu cuerpo harto de diez duros y la cama aparte, pero esas cosas van como van y en aquel tiempo no me dejaron elegir y no me sabe mal ni me avergüenza que fuese en tu pila mi bautizo de amar. Fuiste honrada y sincera y la primera, de segunda mano. Pero, francamente me hubiera gustado mucho más que aquel catre, un pajar donde la primera se hubiera dejado llevar con vergüenza entre mentiras y un poco de 'coña', e ir haciéndolo, sin prisas, derramando ternura. Francamente me hubiera gustado mucho más que hacer de aprendiz mientras en la puerta esperan otros sintiendo el olor de alguien que estuvo antes que yo y no me sabe mal ni me avergüenza. Eres parte de mi historia y por eso puedo dibujarte deseando bajar bandera. Ay, la primera de segunda mano. Francamente me hubiera gustado mucho más que hubiera sido primavera y fuera la primera la continuación de aquellas historias verdes, romances tiernos, que el hermano mayor mentía sentado en la acera.
Francamente me hubiera gustado mucho más. Benévolamente, le gustan vírgenes al adolescente, pero, como usted, se come lo que se encuentra por la calle.