Cómo si tuviera
El cielo en las manos
Cuando por las noches
Suelo acariciar
La cabeza tierna
De mi santa madre
Y así me quisiera
Por siempre quedar
Cuando yo la veo silenciosamente
Cruzar los rincones
Del humilde hogar
Y ocultar su cara repentinamente
Es por una pena
Que la se llorar
Pasamos la vida
Buscando mil dichas
Buscando pasamos
Mil cosas tal vez
Y se nos escapa
De las propias manos
La que Dios nos brinda
Por única vez
Es un pedacito de cielo
Su cara
Que está a nuestro alcance
Y que se nos va
De que vale entonces
Llorarla y nombrarla
Si ya hemos perdido
La felicidad
Cada vez que veo
Pasar a mi lado
Los cabellos canos
De alguna mujer
Pienso en esos niños
Los abandonados
Que no han conocido
A su madre al nacer
Venero a la mía
De cabellos canos
Bendigo su nombre
Al pie del altar
Cada beso suyo
El cielo en las manos
El cielo de un beso
Que no he de olvidar