No pises el cotorro
que no te puedo ver.
No ves que hasta vergüenza
me da ser tu mujer.
Yo quiero, pa' que sepas
tener siempre a mi lado
a un hombre bien templado,
no a un maula como vos.
A un hombre que se juegue,
si llega la ocasión,
la vida en una carta,
sin sentir emoción.
A un hombre que sea hombre
y sepa responder
y no llore cobarde,
igual que una mujer.
Maula
que ante el insulto callaste.
Maula
que cobarde te achicaste.
Maula
que sólo te creés valiente
cuando una noche de farra
te ves enfrente de una mujer.
La barra del boliche
borracha de pernod
mi nombre que es el tuyo
por el suelo arrastró
y vos que de una mesa
oíste aquella infamia
bajaste la cabeza,
cobarde, sin chistar.
Al verte tan compadre,
con tu aire de matón,
te juro por mi madre
te tengo compasión.
No vuelvas al cotorro,
porque mi corazón,
se ha hecho para un hombre
y vos no sos varón.