Ella abrió la puerta y al fin me pude
Mostrar todavía mojado, un tanto impreciso
Y jaloneado tal vez sea un maestro, un doctor muy
Diestro o policía todo sea si el destino me
Deja asomar paso a paso fui por un mundo
Extraño y nublado sin perder lo extraviado,
Todo de cabeza y atado tal vez será un
Señor de gran soltura alguien para esta era
O para ninguna todo sea si el destino me deja
Asomar ella me enseño a oír el
Silencio a dibujar en el cielo un corazón
Y sus historias bordad en llanto en esas noches de
Invierno feroz ella me enseño a decir las
Verdades y a no cubrirlas en el lodazal a no
Perder la ilusión de ese niño y a
Perseguir a la estrella fugaz esto ke se hoy
Hubiera kerido saberlo ese día eso ke
Aprendí con los años lo hubiera
Tenido ayer no naufragaría en la puerta
Cuando esta tocó mi día no me
Deslizaría cuesta abajo en mi piel ella me
Enseño a no perder el camino a no mendigar
Ni una sombra o una luz entre esas estrellas ke
Cuelgan del fuego entre la mirada y el roce e’ su
Voz
Tal vez sea un pintor o un sepulturero entero
Tal vez sea cura o enfermedad bueno para nada o
Nada para todo bueno todo sea si el destino no se
Intenta domar ella me enseño a oír
Las estrellas y en esa kietud encontrar un
Corazón a dibujar la cautela en mis pasos
Toar la noche desde mi balcón yo nunca le
Supe contar cosa alguna ni le agradecí o le
Di una flor no estuve a su lado esos dias tan
Tristes y ahora le hago esta pobre canción