Tres veces siete
TRES VECES SIETE
ARMANDO PALOMAS
El insomnio le raspa las sábanas
al invierno que traigo en mis huesos,
mi botella se quedó vacía,
ceniceros donde guardo besos.
Diez mentiras que dicen verdades,
y un jodido dolor de cabeza,
corazón dame de esa aspirina,
esta noche no quiero sorpresas.
A tus rosas las ha marchitado
la neblina que está en mi cerebro,
cada show yo sigo vomitando,
tengo lentes pero sigo ciego.
La tristeza se ha vuelto un estorbo,
tu mirada se ha vuelto mi vicio,
hay botellas que mueren a sorbos,
yo estoy muerto pero sigo vivo.
Cada vez que yo beso a la noche
se me olvida que ya es de mañana.
Un clamato, un six pack de cerveza,
para mi neurona envenenada.
Gatos perros, salud por mis huevos,
nunca supe cuidarme la espalda
y esta lengua que no tiene pelos,
esta lengua que esta rasurada,
me ha servido para no callarme,
pa’ poder quedarme sin amigos.
Me ha servido para yo pedirte
que esta noche durmieras conmigo.
Dos más uno me dan un veintiuno
que es lo mismo que tres veces siete,
que tus besos sean mi desayuno,
y tus piernas sean mi torniquete.
Y aunque casi se agoten los besos
y quizá yo no entienda razones,
yo me quedaré con sus aplausos
y ustedes con mis siete canciones.
Si no fuera por estos excesos
me habría dado ya por suicidarme,
más no lo hago pues tengo la suerte,
pues me pagan por emborracharme.