Qué singular
tu intento de controlar
mi voluntad a tu antojo,
a tu dimensión.
Treinta y tres, que saber es poder.
Esto no es
lo que vos creíste,
mas el tiempo pasó,
el árbol ya creció
y hasta sombra nos da,
si querés descansar
de los rayos del sol,
con los frutos en tus manos.
Ella está bailando,
divirtiéndose con algo,
tan lejana, tan intensa.
Subdivisión
de las existencias,
dan memorias de un reloj
que no se detiene
y pulsará, cabrón,
a las olas del mar,
a la tierra girar
y al universo su Big Bang.
Ella está bailando,
divirtiéndose con algo,
tan lejana, tan intensa.
Ella está bailando,
está riendo, está soñando,
tan liviana, tan conciente.
Ella está bailando,
divirtiéndose con algo,
tan lejana, tan intensa.
Ella está bailando,
está riendo, está soñando,
tan trabada, haciendo el deber.
(Gracias a Tatis por esta letra)