Hola señor, ¿cómo le va?
¿Por qué tan triste está?
¿Acaso está usted enfermo?
¿O algo anda mal?
Pues sí, sufriendo estoy
Llorando de dolor
Por mi hija que se me descarriló
Y se fue
¿Qué, no la has visto tú? (No, señor)
¿No sabes con quién se fue? (No, señor)
¿Por qué me mientes si apenas, los vieron juntos en un café?
¡Tú me la aconsejaste!
¡Me la echaste a perder!
Y lo peor fue que la enviciaste
¡Qué malo debes de ser!
A mí, no me eche la culpa
¿Por qué no se culpa usted?
Ella se sentía tan sola
Y usted no la supo entender
¿Y qué querías que la entendiera, siempre tuvo que comer?
Ay, señor no sea usted tonto, nunca padre supo ser
Usted con sus exigencias, usted nada más, usted
Criticándole sus faltas, sin ver las faltas de usted
Yo le di buenos ejemplos
No me explico en qué fallé
¡Nunca le negamos nada!
¡Para ella siempre trabajé!
Eso no es suficiente
Hay algo de más valor
Que ni se compra, ni se vende
A ella le faltó el amor
Estás muy equivocado
Amor siempre le sobró
Usted es el equivocado
Pues nunca se lo demostró
Y si alguien es culpable
Ese culpable es usted
No basta decir soy padre
Sino hay que saberlo ser