Vamos de noche en la carretera
y en tu casa nadie te espera,
yo detengo el automovil
y tu sospechas una barbaridad.
Se me erizan los cabellos
siento en el cuerpo un hormigueo,
tus sospechas eran ciertas
esta noche te atacaré.
No te dejaré escapar
tú vendrás conmigo, nadie será testigo...
no es un crimen amar,
tú misma lo has dicho, no va a ser un capricho.
Yo te abrazo poco a poco
y respiro como un loco
Sólo se oyen suspiros profundos
lo demás no lo cantaré.