Hoy que has venido con tiempo
Y que mañana no hay que currar
Voy a contarte una historia de paradójico final
Es el retrato de un pueblo
Pero no data de un tiempo ancestral
No es de esas coplas de héroes
Con duendes, brujas y demás
Érase un pueblo, un pueblo de paz
Y un gobernante de diestro inclinar
La mayoría absoluta obedecía sin dudar
Precario empleo, precario hogar
Que en siete vidas te puedes pagar
Es lo que el gran gobernante
Te puede proporcionar
Pero la guerra estalló
Contra el infiel musulmán
Y sin pararse a pensar
La marioneta cedió
A los deseos de aquel
Que para él quiere el mundo
Y fue un olor nauseabundo
El que a la gente alertó
Donde quedó la rabia que te movía
A luchar por un mundo justo y en paz
Si ahora le das tu voto
A quien mentía
Vistiendo a la muerte de libertad
Toda esa gente no iba permitir
Que sin consenso pudiera ocurrir
Que aquella orgía de sangre
Llevara la firma del país
Y como río en crecida muchos salieron afuera
Con una voz por bandera
Y esta consigna por voz:
“Que no queremos la guerra
Que no juguéis con las vidas
Miráis por la economía
No veis que la vida es oro”
Donde quedó la rabia que te movía
A luchar por un mundo justo y en paz
Si ahora le das tu voto a quien mentía
Vistiendo a la muerte de libertad
Ya era tarde todo estaba decidido
Comenzó la destrucción
Periodistas, madres, viejos y hasta críos
Nadie allí se respetó
Y es curioso como es que la gente olvida
Pues al tiempo sucedió
Que en las urnas, armas de la democracia
Se eligió la sinrazón
Donde quedó la rabia que te movía
A luchar por un mundo justo y en paz
Si ahora le das tu voto a quien mentía
Vistiendo a la muerte de libertad
Donde quedó la rabia que nos unía
A luchar por un mundo justo y en paz
Si ahora le das tu voto a quien mentía
Vistiendo a la muerte de libertad
¡No!