Y es que nunca me acuesto
Sin haber aprendido algo nuevo
Escondiendo mi cabeza entre las sábanas
Derrochando minutos y no ando sobrado de ellos
Tomando del día las últimas bocanadas
Como alma en pena encerrado
En el cuarto de los huéspedes
Creando aureolas de fantasía
Donde hago oídos sordos a las súplicas diarias
Esperando el Pater Noster, la pesadilla
El futuro es ya
El que algo quiere, algo le cuesta
Me lloran los ojos al abrirlos a la claridad
Tiemblan mis manos cuando acaricio tu cabello
No dejando de sentirme un fracasado
Como alma en pena encerrado
En el cuarto de los huéspedes
Creando aureolas de fantasía
Donde hago oídos sordos a las súplicas diarias
Esperando el Pater Noster, la pesadilla