Quiero ver, quiero entrar,
nena, nadie te va a hacer mal,
excepto amarte.
Vas aquí, vas allá
pero nunca te encontrarás
al escaparte.
No hay fuerza alrededor,
no hay pociones para el amor.
¿Dónde estás? ¿Dónde voy?
Porque estamos en la calle de la sensación,
muy lejos del sol que quema de amor.
Te voy pan, quieres sal,
nena, nunca te voy a dar
lo que me pides.
Te doy Dios, quieres más,
es que nunca comprenderás
a un pobre pibe.
Esas motos que van a mil,
sólo el viento te harán sentir,
nada más, nada más.
Si pudieras olvidar tu mente
frente a mí, sé que tu corazón diría que sí.
No hay fuerza alrededor,
no hay pociones para el amor.
¿Dónde estás? ¿Dónde voy?
Porque estamos en la calle de la sensación,
muy lejos del sol que quema de amor.
Muy lejos del sol que quema de amor.