Difícil pensar sin hablar
Difícil hacerse un lugar en los labios
Al toro, si no es por los cuernos
Difícil llevarlo arrastrando al infierno
Yo vi las estrellas de día brillar
Más que nunca en un cielo de lienzo
Me acuesto pensando en mis huesos
Y echo de menos tu peso y tu cuerpo
La sangre que va al corazón
Es témpera roja que endurece el tiempo
Busco tus huellas digitales
Para pintar árboles como los ciegos
Para arrancarle los cristales
A tus pensamientos que son mis gigantes, gigantes, gigantes
Difícil tratar de decir
Si no es con las manos gritando en los muros
Nos muerde la estructura azul
En la esquina de alguno de esos dibujos
El día corriendo veloz
Con las piernas de hosco y brazos de cartón
Mi niña se compra un vestido
Y todo el país me parece distinto
Mi niña se pone el vestido
Y se lo quitó al tiro por darle un sentido
Gigante, gigante, gigante, gigante, gigante
Difícil tocar la guitarra
Si el papel mural se desprende por nada
Difícil hacer el amor
Sin sentir que nos agarramos de una tabla
Si la vida es como un naufragio
Que sea feliz el que pasa remando
Que baile la Virgen María entre tanto
Pero que baile con el diablo
Para arrancarle los cristales
A tus sentimientos que son mis gigantes
Gigantes, gigantes gigantes, gigantes, gigantes