Y en el radio, un cochinero
Pélate del cantón, que, a este, ya lo torcieron
Y písale al Ranflón, que te vienen siguiendo
Se me nubló la mente
Y me eché un paso en seco
En el pecho, mi cuerno
Me encomendé a San Judas
Me pongo un chaleco
Tiro arriba la glock, nomás temblaba el dedo
Escuché un derrapón y los miré a lo lejos
Se vino la rafaguera, la lluvia de balas
En el vidrio, varias impactaban
Me metí en la polvadera y en aquella brecha
La Cherokona, se les pelaba
No fue necesario el rifle
Me les perdí entre las brechas
Y nomás por el desquite, atoré una avioneta llena
Hoy estamos los que estamos
Y mañana ya que sea lo que Dios quiera
Y ahí nomás pa' que sepan como roza la cadena, viejo
¡Victor Cibrian!
Conocieron el miedo
Cuando miraron que el cuatro no fue certero
Por ahí, supe que varios hasta se escondieron
Ya no basta el perdón, a su acción se atuvieron
Un convoy del infierno
Puro cara de trapo, vamos tras el dedo
Las traiciones se pagan, pero con San Pedro
Quiso encender el fuego y quemados se fueron
Le caí a la madriguera
Donde aquellas lacras, con rifles y equipo, me esperaban
Se vino la rafaguera
Tres balas en el pecho del enemigo, me impactaban
Con fuerzas, detoné el rifle
Anótenme cinco a la cuenta
De esta no pude librar
La cosecha es lo que uno siembra
Pues, para morir, nacimos y el que tenga miedo
Mejor que no venga