Mata más gente el tabaco
que los aviones,
y he perdido el miedo a volar,
y enciendo la faria de las grandes ocasiones
en las nubes tengo un “Bemeuve”,
una “Pleiestetion”
tu foto y un par de postales,
sigue escribiendo donde quiera que tú estés.
Felicidad
que bonito nombre tienes,
Felicidad
vete tú a saber dónde te metes.
Felicidad
cuando sales sola a bailar
te tomas dos copas de más
y se te olvida que me quieres.
Nada mas verte
le dije a mi sentido común
que no me esperara levantado
y al volver a casa una nota en el “livinrum”
un adiós en los morros
y desde entonces duermo solo
fintito, acabado, caramba
y pagando los recibos de la luz.
Cuando menos lo esperaba
de pronto un día
a mi puerta llamó la alegría
y resulta que tenía tu carita
y resulta que estabas tan rica
y devoré tu piel, tu carne y tus espinas,
y rebañé,
to el suco, suco, suco, y rebañé.
Desde entonces en verano
nunca pido ensaladilla
ni antes de dos horas de digestión
me tiro al mar
he dejado de abusar
del tabaco, del café,
del tinto y del prozac,
pura Felicidad.