Por no dejar de amar
Viviendo de inventarme
señales del destino
despierto entre los sueños
andando la ciudad
rodando entre las piedras
de todos los caminos
los muros me enseñaron
a no dejar de amar
Tratando de estar cerca
y lejos de mí mismo
creyéndole a los dioses
de carne y corazón
saltando mis paredes
hacia cualquier abismo
caí preso en el miedo
y libre en el dolor
Me miro en el espejo
hablo con mi egoísmo
y el alma me responde
con algo por buscar
será que mis ojeras
son tiempos bienvenidos
que le gané a la vida
por no dejar de amar
Un sabio medio viejo
me dijo que los años
enseñan que la vida
se tiene si se da
y aunque para ese tiempo
me falten los peldaños
la vida me ha besado
cuando la supe dar
A veces laberinto
a veces me hizo daño
pero la vida me ha enseñado
a no dejar de amar