Qué esperas de mi?
Hoy me desperté muy cerca de la cornisa,
y no pienso caerme nena por ir tan deprisa.
Si piensas partir tu- tan solo avisa,
que soy el ermitaño que vive de tu sonrisa.
Pues, tu eres la brisa del mar en la repisa,
eres la alegría que deja un niño en su risa.
Tu eres más que esa última caricia,
nena, eres amor y también malas noticias.
Viciame con tu fragancia,
y pisame con esa elegancia,
y deslízame a otra galaxia,
que tienes el don de llevarme hasta la infancia.
No se que encuentras en mis tonterías,
en mi filosofía esa de fumar maría.
Eres alegría y la mejor compañía,
nena, eres calor en las noches más frías.
Nena, no sé qué esperas de mí.
Si me gustas a la cena y a la hora de dormir,
y no quiero partir, sólo escaparme de ti
para beber Heinekein sobre las calles de París. Si nena, (x2)