Había una vez… tres corderitos hambrientos que no tenían nada más para comer en la tierra donde vivían.
Por eso decidieron cruzar el puente para irse del otro lado de la montaña.
Pero un lobo malo vivía debajo de ese puente ¡y podrían despertarlo!
Igual, los tres corderitos decidieron ir uno por uno.
El primero empezó a caminar y despertó al lobo con este ruido:
¡Chup, chap, chup, chap, chup, chap!
¡Chup, chap, chup, chap, chup, chap!
- ¿Quién se atreve a caminar por mi puente?
- Meee… solamente yo…
Contesto el corderito pequeño.
Y el lobo dijo:
- A ti, ¡te voy a comer! (ñami, ñami)
- ¡Ay, no me hagas eso!
Lloró el corderito pequeño.
- Estoy esperando a mi hermano mediano que esta por llegar. Meee…
Viendo eso, el lobo malo dejó que se fuera el corderito pequeño para esperar que el otro cruce el puente, se quedó bien atento para oír los pasos del corderito mediano, y escuchó:
¡Chup, chap, chup, chap, chup, chap!
¡Chup, chap, chup, chap, chup, chap!
- ¿Quién se atreve a caminar por mi puente?
- Meee… solamente yo…
Contesto el corderito mediano.
Y el lobo dijo:
- A ti, ¡te voy a comer! (ñami, ñami)
- ¡Ay, no me hagas eso!
Lloró el corderito mediano.
- Estoy esperando a mi hermano más grande que esta por llegar. Meee…
El corderito mediano salió corriendo y consiguió cruzar el puente, le lobo prefirió esperar al corderito más grande y se quedo bien quieto esperando el ruido de los pasos:
¡Chup, chap, chup, chap, chup, chap!
¡Chup, chap, chup, chap, chup, chap!
- ¿Quién se atreve a caminar por mi puente?
- Meee… solamente yo…
Contestó el corderito más grande.
Y el lobo dijo:
- A ti, ¡te voy a comer! (ñami, ñami)
- ¡Ven a agarrarme, quiero ver lo que vas a hacer!
¡Y el lobo atacó al corderito!
Salto en el puente en dirección al corderito más grande y se asustó
- ¡Este corderito es muy grande!
Se sorprendió el lobo
- ¡Mejor me voy de aquí!
Se asustó mucho, dio un salto y se cayó en el río.
- ¡Ahhhhh!
El lobo nadó y nadó… ¡muerto de miedo!
Los tres corderitos tuvieron mucho pasto para comer y vivieron felices para siempre.
En cuanto al lobo, nunca más se supo de él…
Y este fue el cuento de los tres corderitos:
‘Meee’
‘Meee’
‘Meee’