Soy el sacerdote que responsable cargará
Sobre sus hombros la presencia
Soy el sacerdote que no se contaminará
Soy el Samuel que se guardará
Yo haré un altar en mi casa
Y pondré leña cada mañana
Y continuamente arderá
Y continuamente arderá
Y continuamente arderá
Y continuamente arderá
El fuego del Señor
Arderá en este lugar
Ninguna potestad lo detendrá
Arderá, Arderá
Arderá, Arderá
Arderá, Arderá
Arderá, Arderá