Hoy que la juventud me desampara,
Siento desvanecerse la quimera,
De los veinte años que mi amor soñara,
Tan solo por amar no envejeciera.
Aunque fueran más de cien años que soñara,
El corazón más muerto, más muriera,
Fue la felicidad la que gozara,
Si el tiempo bello que se fue, volviera.
Es triste envejecer,
Pero es mas triste,
Cuando la fe de la ilusión
Ya muere,
Sin un recuerdo del pasado existes,
Por eso que en el tiempo en que vivimos,
Bajo el sepulcro abierto que me espera,
Tengo el temor terrible del olvido.