Lo que se dice y lo que se hace
Dijimos: "Nunca fuimos nada". E hicimos de todo y de todo nos pasó. En caliente, las palabras no reflejan la anterior o posterior acción. Si sólo hablara el tiempo, aunque sea el silencio, quedaría el margen, el resto, la cintura para no quedar tan mal, para no embarrarse más.
“Hay que ir hasta el final” (y te quedaste con la duda).
“Hay que aceptar la realidad” (y suplicaste algún quizás).
“A trabajar de sol a sol” (y despertaste con la luna).
“Hay que salir a dar pelea” (y te acostaste a esperar).
Dónde un siempre dura nada y un instante una eternidad. Dónde digas lo que digas, nada de lo dicho va a pasar. Y los dichos vuelven, recuerdos que no mienten. Después de cada hecho, efecto dominó de tu inconsciente. Tortura o bendición, eso ya queda en vos.