No seré yo el que bendiga donde pisas
Ni seré yo el que te alabe en la ignorancia
Sin la razón no seré yo el que a ti te siga
No seré yo, no seré yo
No seré yo quien te regale los oídos
Con vanidades encaladas de mentiras
Quizá no esté cuando la vida te sonría
No seré yo, no seré yo
Pero cuando veas caer la última estrella
Y sientas que se apaga la esperanza
Cuando de veras necesites una lanza
Ahí estaré yo, ahí estaré yo
Dando mi sangre para darte a ti la vida
Siendo la fuerza que te sacará del barro
Hasta que rompa tus cadenas con mis manos
Yo seré la calma
No seré yo el que te niegue la palabra
Cuando la gente piense que ya no eres digno
Cuando del mundo solo puedas ver la espalda
Ahí estaré yo, ahí estaré yo
Porque yo atravesé las puertas del infierno
Y fuiste tú el que me trajo aquí de vuelta
Porque dejaste para mí la puerta abierta
Ahí estaré yo, ahí estaré yo
Dando mi sangre para darte a ti la vida
Siendo la fuerza que te sacará del barro
Hasta que rompa tus cadenas con mis manos
Yo seré la calma
Y el tiempo no conseguirá que yo lo olvide
Ni la distancia apagará nunca la llama
Porque yo sé que tú estarás siempre conmigo
Ahí estaré contigo siempre
Dando mi sangre para darte a ti la vida
Siendo la fuerza que te sacará del barro
Hasta que rompa tus cadenas con mis manos
Yo seré la calma, yo seré tu ira